Durante una reunión de la comisión de Servicios Públicos, referentes del sector taxista expresaron posturas críticas y diversas frente al avance de aplicaciones como Uber y Didi. Mario Cesca, de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes de Rosario (ATTI), planteó una mirada autocrítica y propuso integrarse a las nuevas plataformas para sobrevivir. A su vez, se discutieron propuestas tarifarias alternativas, con voces disidentes dentro del propio sector.
Cesca inició su intervención reconociendo un cambio de época en la movilidad urbana. Señaló que el dominio del Estado en el transporte ha llegado a su fin, con afirmaciones provocadoras:
. "Somos conscientes que hemos llegado al fin del monopolio del Estado. Terminamos con la dictadura del Estado en materia de Movilidad"
. "El odio que nos tiene la gente es porque la tuvimos de rehén toda la vida"
. "Hoy 1 millón de personas está de acuerdo con las apps, y 4.000 taxis no están de acuerdo. Esto es irreversible"
Cesca relativizó la eficacia de los controles para frenar el uso de apps ilegales y afirmó que su sector es impopular políticamente: "Somos el enemigo ideal de los políticos".
En cuanto al cambio de hábitos en los usuarios, valoró que las personas puedan elegir cómo moverse: "Hoy el pasajero tiene la suerte de no quedar de rehén".
Sobre la competencia con las aplicaciones, diferenció el sistema de precios dinámicos con el sistema tarifado del taxi:
. "Si ellos cobran 5 y nosotros 10, el valor es 5. El resto es todo lastre"
. "El precio es lo que la gente está dispuesta a pagar"
Frente a esta realidad, propuso que el sector se adapte en lugar de resistir:
. "Saquemos todo el lastre y pongámonos dentro de esas aplicaciones, es lo único que nos puede salvar"
Además, Cesca pidió que se implemente de forma permanente la tarifa 3 (la que rige los fines de semana y feriados), que es un 20% más alta que la tarifa 1 (la tarifa diurna habitual):
. "Más de un 20% no nos van a dar"
Por su parte, Natalia Gaitán, de la Cámara de Mujeres Taxistas, se manifestó en contra del aumento del 40% solicitado previamente por otra entidad del sector (CATILTAR). Consideró que una suba de ese tipo sería perjudicial y no llegaría a los trabajadores:
. "Sería un golpe que hoy saquen una tarifa con el 40%"
. "No va al bolsillo del trabajador (…), va a los costos de relojes, de radiotaxi, de cargas sociales"
. "Hoy un 40% terminaría por destruir el sistema de taxis. Este aumento no es para los trabajadores"