El Rompecabezas de la Muerte en Rosario – Por Ricardo Marconi
Una red de pedofilia contacta a menores y jóvenes y está siendo investigada
En el devenir de una serie de infructuosas investigaciones por la desaparición de Loan, un niño de sólo 5 años que acaparó el interés de toda la población argentina, la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci), a cargo del fiscal general Horacio Azzolin, indicó la existencia de una red de pedofilia que contacta a menores por WhatsApp.
Las víctimas son captadas para que se sumen a “Comunidades” o a grupos de esa aplicación de mensajería. La advertencia fue dada a conocer hace pocas horas desde la página fiscales.gob.ar, donde se puntualiza que dicha red delictiva se dirigen a menores de entre 10 y 14 años, quienes no advierten que la convocatoria está oculta con una fachada de un desafío que es la de crear comunidades amplias, conformadas con muchos integrantes.
Integrantes de la red incentivan a los menores y a adolescentes a sumar a compañeros y amigos de su edad y una vez que están integrando la red se les comienzan a enviar imágenes y videos con contenido sexual violento y discriminatorio. Para que las víctimas les reenvíen archivos similares, les ofrecen dinero a cambio.
Consejos
La incorporación o no a grupos de WhatsApp puede ser configurada por cada usuario dentro de la sección “Privacidad” del menú de Ajustes de la aplicación.
Allí, dentro de la sección “Grupos”, el usuario podrá elegir la posibilidad de que cualquiera (opción “Todos”) pueda agregarlo, que sólo sus contactos (opción “Mis contactos” o sólo determinadas personas (opción “Mis contactos, excepto…”).
Para el caso de niños y niñas menores de edad, una posibilidad para evitar la inclusión involuntaria a este tipo de grupos (realizada por desconocidos o por otros niños) es seleccionar la última opción y excluir a todos los contactos o dejar sólo a algunos de confianza (como familiares).
Adicionalmente, en la sección “Almacenamiento y datos”, en la sección “Descarga automática” puede optarse por no descargar automáticamente los siguientes tipos de archivos: fotos, audio, video y documentos. Además, determinar qué tipos de archivos se descargarán sin intervención del usuario puede evitar la exposición a material no deseado que se remite en este tipo de grupos. 
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Acusan a un “disidente” de “Los Monos”
Las investigaciones policiales que no se conoce públicamente hasta que dan resultado, permitieron arrestar a Carlos Gregorio Ruju, quien fue acusado por tres fiscales el jueves pasado y como resultante de ello quedó detenido con prisión preventiva sin plazos, por los delitos de amenazas, robo y homicidios.
Ruju es un chofer de taxis de 49 años y de las indagaciones realizadas por los fiscales surge su señalamiento como componente de una de las asociaciones ilícitas que tenían como jefe a Pablo Camino en los pasados cuatro años. La justicia pudo determinar que Camino conducía sus asociaciones –según la justicia-, desde las prisiones provinciales o federales, según donde se hallaba circunstancialmente tras las rejas.
El “disidente” fue relacionado delictualmente como conductor de un vehículo utilizado en dos homicidios, en febrero de 2023; en la balacera al carrito “Busca Vidas” y a un caso de amenazas, gestiones que les había ordenado cumplir Camino, en el marco de los que se concretó en base a una “guerra callejera” que sacudió a Rosario entre noviembre de 2022 y marzo de 2023.
El sicario que nos ocupa estuvo prófugo por un período de 12 meses hasta que a comienzos de la presente semana fue identificado en un operativo realizado en barrio Matheu, donde a las autoridades intervinientes les saltó en sus registros el pedido de captura.
Todo llega
Los fiscales Adrián Spelta, Luis Schiappa Pietra y Gisela Paolicelli imputaron a Ruiu como coautor del homicidio de Victorio Benjamín Echavarría, un miembro de la banda, asesinado a traición el 1º de marzo de 2023, y por el oscuro crimen de Wilson Perdomo Silveira, dueño de la casa de comidas rápidas Milton, cometido dos días después.
Ruiu, el “conductor oficial” de la banda, conducía el Renault Sandero que se utilizó para los homicidas de ambas víctimas. El coche pertenecía y le fue robado a Leonel B., un joven vinculado sentimentalmente con una de las integrantes de la banda, Tais Frettes.
Ruiu también fue incriminado por la sustracción del vehículo, que tuvo pocos días antes de los crímenes en Constitución al 3300 y, de acuerdo con la investigación, también ofició de chofer de dos mujeres vinculadas con Camino que amenazaron a los moradores de una casa de Garay al 3400, el 6 de noviembre de 2022, con el propósito de que abandonen la vivienda a pedido del jefe narco.
La trama fue develada en julio de 2023 con la imputación de once personas, entre ellas Camino. Allí se esclareció que dicho recluso, quien estaba alojado en la cárcel federal de Ezeiza y luego en la de Rawson libró una guerra callejera contra dos cabecillas de Los Monos que regentean la barra brava de Newell’s, esto es Leandro “Pollo” Vinardi y Carlos “Toro” Escobar, que tiempo después aparecieron en una bandera simbolizados junto con Ariel “Guille” Cantero, el “capo” de los jefes. Por eso se dijo que Camino integra una facción “díscola” o “disidente” de Los Monos.
Lo cierto es que “esta disputa en el corazón de la mafia no se dirimió sólo con ajustes entre pandilleros. El crimen de Lorenzo “Jimi” Altamirano, el músico punk que fue asesinado el 1º de febrero frente al estadio de Newell’s, la balacera al súper Único de la familia Rocuzzo en los primeros meses de 2023, y los tiroteos a sedes bancarias y a comisarías, donde fueron arrojados notas de contenido intimidante, están enmarcados en esta saga”, señaló la Fiscalía en sucesivas audiencias.
Deuda incobrable
Las autoridades que investigaron los casos que involucran a Ruju entendieron que el núcleo del conflicto entre facciones sería una deuda de 60 mil dólares por un cargamento de droga impago por la facción de Pollo Vinardi.
Ruiu es oriundo de Bella Vista Oeste y trabajaba de peón de taxi, según registros públicos. Había sido detenido en marzo de 2023, en un operativo policial de calle en el que cayeron otros integrantes de la gavilla de Camino, tras una balacera en Villa Moreno. Sin embargo, pudo zafar de las imputaciones y pronto recuperó la libertad. Su participación en la saga de delitos apuntados quedó al descubierto poco después, cuando cayó detenido tras ser identificado en Sarmiento y Ameghino, a metros de la Comisaría 15ª.
Aquellos que siguen esta columna seguro recordarán que Camino está tras las rejas por homicidio desde 2015 y en el 2018, su nombre volvió a sonar como uno de los cuatro verdugos del narco rosarino Rubén “Tubi” Segovia, que murió apuñalado en la cárcel de Coronda.
“Nico” Camino, también mencionado como “El Carnicero” posee causas abiertas por narcotráfico y la instigación de al menos cinco homicidios, entre los crímenes de dos hermanas, considerado un doble femicidio en contexto de narcotráfico.
Oro y drogas como el fentanilo que ya llegó a Rosario
Ya que nos referimos a la problemática de las drogas, en esta oportunidad vamos a agregarle una pizca de oro y drogas ilegales y la relación, entre Latinoamérica, el fentanilo y África.
Luego de décadas de inseguridad casi total, autoridades estadounidenses están colaborando con el gobierno africano para enfrentar la problemática derivada del tráfico ilegal del oro y drogas que produce un promedio de 90 mil víctimas al año, teniendo como foco principal del drama a la comuna urbana de Agadez, en Níger, situada en el desierto del Sahara, en el centro del país, al suroeste de las montañas de Air, perteneciendo la zona al departamento de Tchirozérine.
En esa comuna africana el “Black Axe” nació como Movimiento Anticolonial y se transformó en secta, siendo esta circunstancia una de las herencias que sufre la población africana. Los norteamericanos decidieron ayudar al gobierno para evitar que los rusos dominaran la zona.
Mulas ciegas
Para colmo hay agentes del servicio secreto africano al que se los denomina “Mulas ciegas” que colaboran con los traficantes que no sólo viven del oro, sino que se han convertido en componentes de bandas narcos, donde las drogas ilegales parecen dulces por su formato, aunque en realidad es el denominado en la jerga “cristal”, que predomina, junto a otros estupefacientes, en la costa este de África.
La droga es controlada desde Mozambique –un país del sur de África-, y desde allí es trasladada en mulas o mediante vuelos en los que viajan ancianos. También la droga es consumida por turistas en Mozambique, quienes disfrutan de una larga costa sobre el Océano Índico, donde está el archipiélago de las Quirimbas, que es una extensión de islas de coral de 250 kilómetros, a lo que se suma la isla de Ibo, que posee ruinas de la época colonial que sobreviven bajo el régimen portugués.
Los turistas, afectos a la “cristal” también hacen turismo en el archipiélago de Bazaruto, que posee arrecifes que sirven como protección de especies marinas poco conocidas como el dugongo, un sirenio de tamaño pequeño, que incluía a la ya extinta vaca marina de Steller.
Níger, según la CIA, está siendo utilizado para entrenar terroristas y para optimizar el control Estados Unidos instaló una base militar, con más de 1.000 militares apostados, que, nos dicen, tiene un costo de mantenimiento anual mucho mayor a 25 millones de dólares anuales. Desde allí, para paliar los graves problemas que sufre la población de Agadez, se le provee a la misma ayuda alimentaria.
La situación política
Hay que recordar que el 26 de julio de 2023 hubo un golpe de Estado en Níger y el presidente fue detenido en su casa de Niamey, la capital, tras lo cual declararon públicamente que habían tomado el poder. Las grandes potencias formalmente condenaron el golpe, pero no accionaron. Luego los analistas internacionales advirtieron que los responsables del golpe de Estado habían tomado “otro rumbo” y por esa razón la Casa Blanca y Francia amenazaron con cortar las relaciones con Níger.
Esta última circunstancia posibilitó que el presidente depuesto, Mohamed Bazoum, a pesar de continuar detenido, logró hablar con líderes mundiales y recibir visitas en su prisión domiciliaria. Los militares golpistas comenzaron a preocuparse cuando los países vecinos amenazaron con entrar en guerra, aunque por dos motivaciones opuestas como eran frustrar el golpe o garantizar su éxito.
La Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) le dio un ultimátum a la junta el 30 de julio pasado: debían restituir a Johamed Bazoum en el poder en el plazo de una semana o atenerse a las consecuencias, lo que incluía una posible acción militar y los militares golpistas cerraron el espacio aéreo del país. Tanto Estados Unidos –que evacuó su embajada- como Francia presionaron a la Junta golpista para que restablezca la democracia y de inmediato países europeos evacuaron a sus ciudadanos.
Como era de esperarse hubo disparos en las calles y la población, en su mayoría apoyó el golpe, lo que da la idea de la situación imperante en la población.
Volvamos ahora al tráfico del oro y drogas y a las conexiones del tráfico de drogas con el terrorismo islámico.
La población más pobre de Agadez “trabaja” mayormente en la construcción de túneles en el desierto, sin ningún sistema de seguridad que garantice que, al hacerlo, no perderán su vida en el intento. Un pantaloncito corto, con el torso descubierto, con sandalias, y baldes, un martillo y cortafierros, casi en plena oscuridad –ya que se alumbran bajo tierra con velas-, trabajan hombres y niños, sobre las paredes del túnel para extraer oro, que en cualquier momento pueden venirse abajo tras una explosión imprevista. Esto último lo indicamos ya que del túnel deben salir antes de las 17, ya que ese es el horario en que se acordó que coordinadamente se producen explosiones para generar el ingreso a nuevos túneles en toda la región. Concluidas las mismas, todos vuelven a su tarea para hacer “horas extras”.
Los esclavizados trabajadores de hecho sólo cuentan con el apoyo de militares armados para sobrevivir y así y todo, de tanto en tanto, se producen matanzas por ataques sorpresivos de grupos terroristas enemigos, que buscan apropiarse del oro sacado de los túneles. En síntesis, el infierno en la Tierra.
Antony John Blinken, secretario de Estado norteamericano, antes del golpe, formalizó una visita oficial y se comprometió a aportar 150 millones de dólares para apoyar el proceso democrático, luego caído en desgracia. La población incendió la Embajada de Francia y hasta izaron la bandera rusa. Ello no fue casualidad. Los rusos obtuvieron contratos mineros y los terroristas generaron un atentado.
El terrorismo de Boko Haram
En lo que va del 2024, el terrorismo de Boko Haram sigue actuando en el nordeste de Nigeria y, aunque sus acciones han ido perdiendo fuerza y notoriedad, los secuestros masivos y los asesinatos y matanzas de civiles —cristianos y musulmanes no radicalizados—, todavía proliferan.
Es más, en los últimos años, el modus operandi de Boko Haram está siendo replicado en otras zonas del país —sobre todo en el noroeste— por grupos de bandidos que han convertido esta forma brutal de delincuencia en su mayor fuente de ingresos.
Las enormes riquezas naturales y humanas de Nigeria no redundan en el bien de la población que, mayoritariamente, vive con poco más de 1,5 dólares al día. A esto hay que sumar la división étnica y geográfica, que divide el país entre el norte árido y seco, con la mayoría de la población musulmana, y el sur, rico en recursos naturales, con una población fundamentalmente cristiana y animista.
Para colmo aumenta el número de desplazados internos que huyen de la violencia que aumenta y las cifras que se dan en ese sentido alcanzarían a 3 millones en todo el país, aunque la mayoría se concentran en el centro y el oeste del norte de Nigeria, donde actúan grupos armados. Esto ha llevado a la organización Manos Unidas a colaborar en un proyecto de apoyo a estas personas que han tenido que dejar toda una vida atrás y que cargan a sus espaldas con la mochila del miedo y el trauma por lo vivido. Manos Unidas es una iniciativa que inició el Servicio a, Refugiado que trabaja en ayuda de los refugiados. En 2023, se contabilizasen más de 4.300 secuestros en todo el país.
Hay que hacer notar que Manos Unidas trabaja en Nigeria desde 1991 y tiene 118 proyectos en marcha por más de 5 millones de euros. La mayoría de las propuestas están relacionadas con la educación y la sanidad (16 %) y derechos humanos (15%).
Objetivos de Boko Haram
En las aldeas que atacan los grupos terroristas de Boko Haram roban comida, cosechas, frutas, verduras, y animales, y queman y destruyen todo, sobre todo si se trata de enclaves cristianos.
Asimismo, toman áreas, regiones y ofrecen protección a la gente de las aldeas, las subyugan y la gente les ofrece información y ayuda como contraprestación.
El dinero de los rescates sirve a los terroristas para comprar vehículos y armas, algunas sofisticadas, por lo que no es raro verlos llegar en camionetas con ametralladoras bien montadas en sus cajas. Nadie habla sobre la procedencia de los vehículos y las armas.
El fundamentalismo de Boko Haram se está extendiendo al centro africano y al suroeste y todos los cristianos africanos esperan la intervención de las agencias de inteligencia y el ejército para obtener seguridad plena, ya que el tráfico de oro, la droga y el accionar de las pandillas de secuestradores avanzaran día a día.
Las drogas en África
Desde enero pasado África está sufriendo la expansión de una nueva droga: Se trata de Kush, un cóctel de cannabis, drogas químicas y, posiblemente, “huesos humanos pulverizados”.
El Kush es una droga tan peligrosa como la heroína y la cocaína, combinada con fentanilo. Ha irrumpido en países de África, entre ellos Sierra Leona y el cóctel ya capturó a jóvenes de barrios pobres y lugares adinerados.
El “cóctel” mata alrededor de una docena de consumidores cada semana y miles más terminan hospitalizados no solo por sus efectos, sino por el riesgo que implica perder el control del cuerpo. Se trata de un acontecimiento muy siniestro para el país, especialmente porque apunta a los jóvenes que son hospitalizados en estado crítico.
Sobre la presencia de huesos humanos pulverizados, no hay conclusiones claras sobre la presencia de estos ni su origen. Algunos atribuyen el suministro a saqueadores de tumbas, pero carecen de pruebas. ¿Para qué se usarían? Algunos sugieren que se agrega por el contenido de azufre en las cenizas, mientras que otros mencionan que puede ser por la presencia restos de narcóticos en quienes consumieron fentanilo o tramadol.
“Si bien los niveles de azufre en los huesos son poco significativos, fumar azufre conllevaría la producción e inhalación de dióxido de azufre, altamente tóxico”, según Michael Cole, profesor de Ciencias Forenses de Inglaterra, quien agregó que “cualquier resto de narcótico en los huesos es ínfimo”.
La combinación de esta droga induce a sus consumidores a la somnolencia con un efecto sedante. Sus efectos pueden variar según el preparado y la propia reacción del consumidor. El cannabis produce euforia, relajación y alteración de la percepción. En contraste, el fentanilo, un potente opioide, genera euforia, confusión y somnolencia. El tramadol, opioide menos potente que el anterior, también induce somnolencia y atontamiento, desconectando a los consumidores de su entorno.
La droga kush se extiende en África Occidental y en Sierra Leona, donde el desempleo juvenil roza el 60% en una de las naciones más pobres del mundo. Algunos consumidores llegan a estar todo el día fumando Kush porque es altamente adictiva y cada cigarrillo tendría un costo de 10 dólares o 200 leones, la moneda de Sierra Leona. El 60 % de las personas que se atienden en el único hospital de Sierra Leona se estarían atendiendo de las implicancias en salud del Kush a consecuencia de la generación de episodios psicóticos o por sufrir accidentes al perder el control de su cuerpo o por tirarse al paso de los autos.
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Declaró la hija de Alberto Piccinini
Aunque no se le dio la importancia que el caso requería en los medios, se conoció la declaración judicial que cumplimentó Claudia Piccinini, hija de Alberto Piccinini, uno de los dirigentes sindicales de la empresa siderúrgica Acindar, a mediados de los 70, y protagonista fundamental del Villazo, minuciosamente relatado en varias columnas de Proyecto Escaño.
El padre de Claudia de Claudia no llegó a pisar los estrados judiciales, en el marco de la causa que investiga delitos de lesa humanidad, cometidos en Villa Constitución desde marzo de 1975. Sí lo hicieron hijas e hijos de dirigentes sindicales que participaron de la lucha gremial conocida como el Villazo.
La mañana del martes 29 de mayo pasado en los Tribunales Federales ubicados en Bulevard Oroño al 900, Claudia Piccinini se sentó por primera vez frente a un juez.
Alberto Piccinini, falleció en mayo de 2021 a los 79 años, casi 50 años después de la feroz represión estatal desatada en la ciudad ubicada 60 kilómetros al sur de Rosario.
Con El Ciudadano, Claudia reconstruyó cómo fue su declaración, la enorme ayuda de sus abogados querellantes para llegar a esa instancia y cómo fue el trabajo de rearmar los recuerdos de los hechos convulsionaron su ciudad natal, y su vida personal.
Ya hemos relatado la gesta de El Villazo, en los finales de 1974 y la llegada, el 20 de marzo de 1975, de 4000 policías y gendarmes un año antes del golpe de Estado, por lo que se entendió que ese proceso funcionó como ensayo de lo que sucedería en nuestro país, considerado un proyecto de terrorismo de Estado con su seguidilla de secuestros y asesinatos, que esperan una definición legal antes de concluya el corriente año.
Vale apuntar que cuando Claudia nació en 1964, su padre era ya militante gremial y tenía 21 años cuando la Lista Marrón se impuso con el 65 por ciento de los votos y los trabajadores recuperaron el gremio, ella tenía diez años, fue en 1974.
A su padre se lo llevaron tres meses después, en marzo del 75 y no lo volvería a ver hasta ya entrada su adolescencia en 1980, cuando ella tenía casi 16 años.
Claudia recordó reuniones de dirigentes en el living de su casa. También que antes del secuestro de su papá hubo dos allanamientos en su vivienda. Asimismo, que los primeros días de detención pensaron que apenas sería un breve tiempo y que tenía dos amigas más cuyos padres también estaban secuestrados pero que nunca hablaban del tema.
Al ser entrevistada recordó que nadie nunca le habló mal de su papá y que así entendió el apoyo que tenía, su liderazgo. Al ser entrevistada hizo mención a las cartas que le enviaba desde el penal de Rawson en Chubut, así como que al ser detenido viajó a esa provincia a verlo.
Su docente –consideró-, era “medio maestra ciruela”, y le explicaba su lucha y acciones de su padre. Recordó Claudia que cuando él volvió a su casa en Villa Constitución le pareció que era un hombre mayor, viejo, aunque no tenía ni 40 años. Recordó que se sentía “contenta pero rara”, porque eran muchos años sin verlo y que lo tomó del brazo para pasear por el centro de Villa Constitución, “quería que me vieran, que vieran que yo tenía papá, que había vuelto mi papá”.
Claudia, la hija de Alberto, apuntó “la enorme impronta de miedo” con la que volvió de la cárcel, miedo a que le pase algo a ella o su hermano menor. Recordó, también, que apenas salió en libertad —en verdad, en un régimen de libertad vigilada como lo llamaban los militares— volvió a participar de la actividad gremial.
En la nota de Candela Ramírez, Claudia, en una de las últimas audiencias del juicio que investiga los crímenes cometidos en Villa Constitución desde marzo de 1975, declararon hijas e hijos de dirigentes sindicales que participaron en El Villazo Villa Constitución.
Su palabra es fundamental porque permite reponer el contexto de la época de los secuestros y también de medir el impacto que tuvieron esos crímenes en la vida de sus familiares.
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*Ricardo Marconi es Licenciado en Periodismo y Posgrado en Comunicación Política
Viene de acá: En operativo conjunto entre Provincia y Nación recapturaron a Mauricio Laferrara, sicario de Esteban Alvarado
Continúa aquí: Sherrer, el espía que llegó del norte
